Condenan a dos hombres por el robo a dos pastelerías céntricas
Se trata de Santiago Exequiel Insaurralde, de 26 años y de Brian Alberto Ponce, de 29 años. Los ilícitos fueron cometidos en enero, en dos locales gastronómicos ubicados en Boulevard Gálvez y Necochea y en General Paz y Martín Zapata.
Santiago Exequiel Insaurralde (26 años) y Brian Alberto Ponce (29 años) fueron condenados a 10 años y seis meses de prisión y cinco años de prisión, respectivamente, por robos que cometieron con armas de fuego en enero, en dos locales gastronómicos reconocidos de la ciudad de Santa Fe.
La sentencia fue dictada ayer en el marco de un juicio abreviado. Según informó el Ministerio Público de la Acusación, Ponce e Insaurralde fueron condenados como coautores de dos hechos de robo agravado por el uso de arma de fuego (cuya aptitud para el disparo no pudo acreditarse).
La Fiscalía aclaró que a Insaurralde se le impuso una pena mayor porque tiene antecedentes penales condenatorios. Por ese motivo, la condena por los dos robos se unificó con otra anterior por la autoría de una tentativa de homicidio, y en el marco de la cual tenía libertad condicional. Asimismo, indicaron que ayer se dispuso la revocación de la misma.
Los robos
El primer hecho delictivo ocurrió el martes 11 de enero, minutos después de las 22:00 hs, en un negocio ubicado en Boulevard Gálvez y Necochea. Conforme lo relatado en la audiencia, los condenados ingresaron al local, Ponce exhibió un revólver con el que apuntó a dos empleadas y les exigió que le entregasen dinero, mientras Insaurralde inmovilizó a otro empleado. Finalmente, escaparon por calle Necochea hacia el norte y se llevaron una caja registradora.
El segundo fue el miércoles 12 de enero, alrededor de las 22:00 hs, en un local ubicado en General Paz y Martín Zapata. Según se informó en el juicio, el accionar delictivo de los condenados fue similar al del día anterior. No obstante, se detalló que en este caso fueron cinco los empleados a los que Ponce apuntó con el arma de fuego. Por último, sustrajeron por la fuerza la caja registradora y escaparon del lugar por calle Martín Zapata hacia el oeste.