Santa Fe es una de las tantas provincias donde funcionan empresas de diversos rubros que se benefician de las medidas antidumping. Esta herramienta fue establecida con el objetivo de evitar que los productos del exterior puedan beneficiarse de la competencia desleal en suelo argentino.

En territorio provincial hay al menos 17 medidas anti dumping, solicitadas por firmas del rubro electrodoméstico, metalmecánico, artículos del hogar y bienes de capital. En caso de empezar a limitarse esa herramienta, como pretende el gobierno de Javier Milei, esas empresas quedarán expuestas a la competencia con productos de afuera que pueden posicionarse a precios más bajo, copar el mercado y luego subir los precios a su antojo.

El economista del Centro de Economía Política Argentina (Cepa), Hernán Letcher, mostró algunos datos que exponen el impacto que puede llegar a ocasionar la flexibilización de este instrumento, de protección a la industria y el empleo local.

De acuerdo a los registros que figuran en las resoluciones del ex Ministerio de Desarrollo Productivo, Santa Fe sería la segunda provincia más afectada, ya que en Buenos Aires se encuentran vigentes 44 medidas con el objetivo de proteger a sus industrias, del rubro metalmecánico, plásticos, bienes de capital, electrodomésticos y otras.

Límite a medidas antidumping: cómo afecta a Santa Fe la decisión celebrada por Caputo y Milei
Límite a medidas antidumping: cómo afecta a Santa Fe la decisión celebrada por Caputo y Milei

En ese sentido, Letcher preguntó: “¿Qué van a hacer Pullaro, Frigerio, Llaryora y Jorge Macri frente a la decisión del gobierno de debilitar las medidas anti dumping? ¿Nacho Torres, Poggi, Saenz y Orrego van a defender a las empresas locales y el empleo o van a mirar para otro lado?”.

Para Santa Fe, las empresas que solicitaron esta medida son en su mayoría las que trabajan en la zona del gran Rosario y del cordón industrial, y que albergan a buena parte del empleo privado de la región, dinamizando también otros sectores.

Las medidas antidumping son un conjunto de acciones y recursos a los que pueden apelar las empresas nacionales y que se implementan para proteger la industria local y evitar prácticas desleales de importación. Pretenden evitar que ingresen productos de afuera a un precio más barato para posicionarse, destruir la producción local y luego fijar los precios a su antojo.

Entre las medidas antidumping se encuentran: Aplicación de derechos de importación adicionales a los productos importados. Establecimiento de cuotas de importación. Imposición de multas y garantías de cumplimiento. Elaboración y firma de acuerdos comerciales.

Una de las modificaciones más destacadas que introdujo el gobierno esta semana es la reducción del plazo de duración de las medidas antidumping. Actualmente, las medidas pueden renovarse de forma indefinida por un máximo de cinco años. Con la reforma, la vigencia se limitará a tres años, con una única posibilidad de extensión por dos años más, lo que evitará su prolongación.