Los ocho rugbiers imputados por el crimen de Fernando Báez Sosa tuvieron el veredicto y la sentencia: el tribunal encabezado por los jueces María Claudia Castro, Christian Rabaia y Emiliano Lázzari los encontró culpables a todos. Pero en la pena distinguió participación autoría directa y participación secundaria: prisión perpetua para cinco de ellos y 15 años de prisión para otros tres.

Los acusados Máximo Thomsen (23), Enzo Comelli (22), Matías Benicelli (23), Luciano Pertossi (21) y Ciro Pertozzi (22) fueron condenados a la prisión perpetua como coautores con alevosía de homicidio doblemente agravado, en tanto que Ayrton Viollaz (23), Blas Cinalli (21), Lucas Pertossi (23), fueron vistos como participes secundarios.

Los ocho imputados llegaron al edificio judicial de la calle Belgrano 141 a las 12.17 de este mediodía, trasladados desde la Unidad Penal 6 de Dolores. Un importante operativo policial cubrió el recorrido que hicieron los imputados desde el penal, donde se encuentran alojados desde el 1° de enero, ubicado sobre la calle Riobamba 251, distante a unas 10 cuadras del palacio de justicia.

Tras la sentencia, los acusados volverán al penal donde aguardarán el destino ante una eventual condena, informaron fuentes penitenciarias.