“Hay que tener la rebeldía suficiente para modificar el status quo del Concejo"

Guillermo Jerez ingresó al Concejo en 2019 con casi 25 mil votos. A tres años de asumir, el edil realizó un balance de su labor legislativo en la ciudad, donde reconoce las dificultades burocráticas, el desconocimiento y los tiempos de la Municipalidad para gestionar proyectos o iniciativas.

En este panorama el partido se encuentra con el foco en la organización popular y crecimiento barrial. "Estamos recuperando nuestra mística, viendo si las soluciones las podemos encontrar de manera más autogestiva y no depender de la banca", explicó.

Sobre la gestión actual del Municipio, sostuvo que durante la pandemia la prestación de servicios públicos estuvo "prácticamente ausente", pero reconoce que "de un tiempo a esta parte hubo un repunte de la gestión".

— ¿Cómo ves a la gestión del Intendente Emilio Jatón?

— Tuvo un gran cambio desde la pandemia, en donde prácticamente estaba ausente respecto a algunas situaciones que sucedían en la ciudad de Santa Fe. Nosotros entendíamos que esa era la postura más cómoda, donde se relegaba a los lineamientos que emanaba el presidente o el gobernador de la provincia.

También en esos primeros años todos veíamos la ciudad con muchos problemas en la prestación de los servicios públicos: pastos altos, muchas zonas de la ciudad con luces apagadas, oscuras. Eso denotaba en donde estaba parado el Intendente, todos lo veíamos.

Ahora de un tiempo a esta parte hubo un cambio, un repunte en la gestión, un poco más ordenada. Particularmente nosotros criticamos mucho eso: decían que iban hacer una cosa y después no lo hacían, que haya cumplido con enviar el mensaje de nocturnidad y que se presente los pliegos de transporte público de pasajeros son señales importantes en relación a la mirada y el modelo de ciudad.

— ¿Y del trabajo de Barrio en el Concejo?

— Las expectativas que al principio había en torno a la banca eran altas, porque es propio del desconocimiento tanto propio, como de no conocer la institución. Nos pasó llegar en medio de una pandemia, no fue fácil, pero ahora estamos más afianzados y entendiendo cómo es la dinámica del Concejo.

Si administramos mejor todas las expectativas y enfocamos mejor lo que pedimos, a quién le pedimos, vamos a ganar todos y me parece que ese es un aprendizaje que podemos volcar en este momento.

Soy un concejal de un monobloque, significa que no estamos tanto en la disputa de poder. Por lo tanto, la mirada que tenemos acerca de lo que podemos hacer ahí adentro es más desde la propuesta. 

Si hay una oportunidad donde podemos estudiar y hacer aportes sobre los cambios que benefician a vecinos, lo hacemos, no especulamos si lo mandó el Ejecutivo o si lo mando la oposición. 

Viendo en retrospectiva, hemos tenido algunos logros: cuando se discutió habitabilidad aportamos una mirada que no estaba en el código, en los principales temas que se discutieron dimos nuestra mirada. Después aprobamos una ordenanza propia que fue la de acceso a Cannabis Terapéutico, ahí resta ver si se reúne el Consejo Consultivo, la reglamentación, etc.

En seguridad logramos aggiornar una ordenanza vieja, hicimos que los concejales puedan tener la facultad para llamar a las mesas barriales de seguridad, para empezar a discutir con la ciudadanía las distintas propuestas. Nos metimos los principales temas de la ciudad, con el escaso margen que tenemos para incidir.

— Estas finalizando tu mandato ¿Qué expectativas hay para el próximo año?

— Hemos definido efectivamente que vuelva a encabezar. Tuvimos alguna dificultades, una compañera que no pudo hacer una banca y después prefirió no participar de las experiencias electorales, que sabemos que es un capital para instalar una cara.

La voluntad colectiva es entonces de volver a renovar la banca. También entendemos que es un lugar importante para ocupar en la ciudad de Santa Fe, que haya una fuerza como Barrio, que siga teniendo una representación en el concejo y que aporte otra mirada en los temas que se discutan.

Hay un espacio que no se siente representado por las fuerzas políticas tradicionales, y después hay una agenda que hay que ver cómo logramos mechar e incluir que es un poco lo que intentamos: mechar e incluir.

Como espacio político, como grupo, estamos profesionalizándonos, nos estamos formando, consolidando como un grupo que puede estar preparado para gobernar en algún momento en la ciudad de Santa Fe. Nos estamos afianzando.

— ¿Ese intento de afianzamiento es interno, o vienen charlando con otros espacios?

— Internamente, que es lo que yo capitalizó como "know how", o desarrollar un conjunto de saberes, que es trabajar y tener cuadros técnicos. Creo que eso lo tenemos en, por ejemplo, la discusión de transporte público, nosotros tenemos un compañero con el que veníamos estudiando hace bastante el tema, ellos habían desarrollado un esbozo. No se puede discutir el sistema de transporte público pasajero si no sabemos cómo se mueve la gente en la ciudad y para saber cómo se mueve la gente hay que tener una matriz, un origen- destino. Bueno, nosotros esa discusión la damos, eso no lo decía nadie hace dos años y la municipalidad lo hizo.

Y la parte más política en eso es fundamental, es decir, interna y dialogar con otras fuerzas que eventualmente podemos construir, sabemos que los caminos de las alianzas no son solo eso. No hemos tenido buenas experiencias, creo que más que nada por la falta de experiencia.

—  ¿Cómo ves el debate en el Concejo?

— Hay un error que muchas veces uno puede cometer y que quizás cometimos, y es creer que uno es fundacionista, que el mundo empieza cuando llega. Y esta es una institución que va a cumplir 150 años. Tiene su historia, su cultura, no sé, me parece que hay que entender esa dinámica, de cómo funciona el concejo y respetar eso. 

Pero también, saber que no todo es uso y costumbre, y tener la rebeldía suficiente para modificar el estatus quo respecto a la discusión de agendas políticas y los proyectos que se discuten.

— ¿Qué proyectos tienen en agenda? 

Creemos que la economía social y el cooperativismo son grandes herramientas. ¿Quién dijo que las cooperativas tienen que ser una panadería, una peluquería? ¿Y por qué no pueden ser rentables? Si nosotros en Santa Fe tenemos polos de conocimiento, polos científicos, tecnológicos. Con el proyecto de adoquines transferimos tecnología que estaba a disposición en los institutos de investigación del Conicet para generar trabajo.

En barrio Cabal, empezó a funcionar la cooperativa Ecomat. Se trata de la realización de adoquines de plástico y arena. Mandamos hacer una máquina que diseñamos con un ingeniero, que trabaja los adoquines con plástico y arena. Creemos que ese es nuestro gran proyecto porque es recuperar el plástico y además genera trabajo y también iremos haciendo calles, veredas y estos adoquines son competitivos. 

Nuestro mensaje también es la valorización de los residuos y para cambiar el modelo de gestión de residuos. Nos parece que esa es la punta de lanza para concientizar. En un barrio ves todas las botellas tiradas y ahí se genera un clic increíble, ese es nuestro proyecto así como ambicioso.