Diputados empieza a debatir Boleta Única de Papel: los detalles del proyecto
La Cámara de Diputados debatirá en comisiones el proyecto de ley venido en revisión del Senado sobre Boleta Única de Papel (BUP), y tendría un trámite exprés con el objetivo de concluir las reformas electorales antes del tratamiento del Presupuesto.
La idea es obtener dictamen a la mayor brevedad en un plenario de las comisiones de Asuntos Constitucionales, Justicia y Presupuesto, de manera tal de catapultar la iniciativa al recinto junto con el proyecto, ya dictaminado, de Ficha Limpia.
En la madrugada del viernes pasado, con 39 votos a favor y 30 en contra, se aprobó en el Senado el proyecto de BUP que modifica el Código Electoral, una iniciativa que se encontraba frenada desde el 2022, cuando obtuvo media sanción de Diputados.
Se mantuvo trabada durante todo este año hasta que el oficialismo cedió a un cambio propuesto por la senadora rionegrina Mónica Silva para eliminar el casillero en blanco con la opción de votar lista completa, que era resistido por los partidos provinciales que no presentan candidatos en todos los tramos.
La duda es si al volver a Diputados se insistirá con el proyecto original o, lo que es más probable, se aceptan los cambios del Senado.
La Cámara Alta aprobó una versión de la BUP que adopta el modelo mendocino: éste propone condensar toda la oferta electoral para cargos nacionales en una única planilla de papel, la cual se divide en filas horizontales para cada una de las categorías a cargos electivos, y columnas o franjas verticales para cada una de las agrupaciones políticas que compiten.
Por cada tramo y por cada alianza electoral habrá un casillero vacío.
El elector deberá seleccionar solamente una opción por cada categoría: si marca dos o más casilleros el voto se considerará nulo.
En tanto, si no marca ningún casillero se considerará voto en blanco en esa categoría específica.
No habrá un casillero específico para el voto en blanco.
Si una agrupación política no presenta candidatos en alguna de las categorías se incluirá en ese espacio la inscripción "No presenta candidatos".
La BUP tendrá impresos los nombres de los primeros cinco candidatos de la lista de diputados nacionales, y se incluirán fotografías a color de los primeros dos candidatos (de acuerdo a la ley de paridad de género serán un hombre y una mujer, o viceversa).
En la categoría de senadores nacionales, aparecerán con foto los dos candidatos titulares, al igual que el candidato a presidente y vicepresidente.
Las listas completas de candidatos deben ser publicadas en afiches o carteles en cada cabina de votación, asegurándose que tengan una adecuada visibilidad.
Con respecto al orden de ubicación de las listas de las coaliciones electorales se resolverá por sorteo.
En tanto, el Ministerio de Interior, a través de la Dirección Nacional Electoral (DINE) sería el responsable de imprimir y distribuir las boletas a lo largo y ancho del país.
Ventajas de la BUP
En primer lugar, elimina la necesidad de los distintos partidos políticos de reponer boletas, por la única razón de que con este sistema no hay papeletas en el cuarto oscuro.
La boleta única la recibe el votante antes de entrar al cuarto oscuro.
Se suprime así el problema de la rotura o robo de boletas, así como el fenómeno de las "boletas truchas".
Los cuartos oscuros podrían ser mucho más chicos, o directamente desarrollarse en boxes de votación.
En un aula podrían haber varias mesas de votación y no solo una como ocurre con el sistema vigente en elecciones nacionales.
Por otro lado, se reduce significativamente el operativo de fiscalización de los partidos políticos, equilibrando las condiciones entre los partidos grandes y los más chicos.
A diferencia de los primeros, los partidos chicos no tienen el "aparato" para fiscalizar los comicios en cada mesa de votación de cada escuela donde se realiza la votación.
Otra ventaja: la impresión de la Boleta Única, a su vez, queda a cargo exclusivamente del Estado, por lo que le quita el financiamiento que los partidos políticos obtienen en las elecciones que se realizan con la boleta tradicional.
Esto reduce el margen de discrecionalidad en el uso de los fondos que reciben del Estado nacional para las campañas.
También el mecanismo repercute positivamente en el huella ecológica, ahorrando litros y litros de tinta y papel, sin contar con el ahorro económico fenomenal que se lograría por la caída drástica en la cantidad de boletas a imprimir.
La Boleta Única, en tanto, agiliza el proceso de recuento de votos, con la posibilidad de implementar sistemas de escaneo para leer rápidamente la información electoral y de esa forma tener escrutinios mucho más expeditivos, evitando tener que esperar hasta altas horas de la noche para conocer el resultado.
Por último, mientras que la boleta tradicional partidaria desalienta el llamado "corte de boleta" (si bien claramente no lo anula) el sistema de Boleta Única le simplifica al elector el trámite para realizar votos cruzados, eligiendo a candidatos de distinto signo para cada categoría.
En otro orden, la BUP significa un golpe a la “logística” de ciertos partidos políticos, que usaban las boletas como elemento de propaganda política.