Por César Malato (Militante Peronista y de la Ec. Social y Solidaria)

La canción y la poesía de Sandra Mihanovich sobre el deseo que no se prohíban cosas, fue escrita luego de la oscura experiencia dictatorial 1976/1983, en una Argentina que transitó sus etapas mas negras prohibiendo. Prohibiendo nombres, símbolos, reuniones de dos o más personas. Actividades gremiales, políticas, libros, canciones, cátedras, actividades, banderas.

Esta semana un cuerpo Colegiado, tal vez el que ostenta más carácter Democrático de los Órganos de Gobierno de nuestra Ciudad, alza las manos, conforma una mayoría de Ediles para, justamente, PROHIBIR. Augura la iniciación de este camino de órganos de la Democracia votando prohibiciones, desde nuestro punto de vista al menos, muy cuestionables.

Están las Ordenanzas, Las Leyes Provinciales, los Decretos Nacionales – ahí está el tan cuestionado DNU o la Ley Bases- por encima de la CONSTITUCIÓN NACIONAL? Respuesta sin posibilidades: NO.

El ART 14 Bis de la Constitución tantas veces citado, usado por Jurisprudentes y Dirigentes de distinto signo, dice textualmente “ El trabajo en sus diversas formas gozará de la protección de las leyes, las que asegurarán al trabajador: condiciones dignas y equitativas de labor; jornada limitada; descanso y vacaciones pagados” y abunda en ofrecer garantías para quienes se quieran dar “organización sindical libre y democrática, reconocida por la simple inscripción en un registro especial”.

Pregunto de nuevo: puede una Ordenanza desconocer la CONSTITUCIÓN NACIONAL y pretender situarse por ENCIMA DE LA CARTA MAGNA?? Nuestra respuesta es contundente: NO.

Es bien sabido que las HEGEMONÍAS SOCIALES y POLÍTICAS, imponen cuáles cuestiones son prioritarias, sobre que asuntos actúa la gestión pública y la gestión simbólica del discurso dominante, organizado tanto desde la gestión Gubernamental y desde el vértice del Poder- y de esa forma DEFINE COSAS.

Como se mencionan, como se definen, por ejemplo, QUE ES TRABAJO Y QUE NO. 

Es trabajo cuidar un auto, lavarlo, fuera del horario del Estacionamiento medido, y DE COMÚN ACUERDO ENTRE quién demanda el SERVICIO y quién lo brinda, o sea ENTRE DOS PARTES QUE PACTAN LIBREMENTE? Nosotros creemos que si. QUE ESE SERVICIO “ES” TRABAJO.

Desde la Economía Social y Solidria damos cuenta hace mucho tiempo, que existe desde hace al menos 20 años, una cantidad estimada entre 8 y 9 millones y medio de personas – ciudadanos argentinos- que se auto- gestionan su ocupación y su trabajo. Enorme Universo de personas que se auto incluyen en el MERCADO LABORAL desde sus saberes, capacidades, y experiencias comunitarias acumuladas. Oficios, ocupaciones, “changas”, que proveen sustento a millones de familias en Argentina: cartoneros, campesinos, artesanos, vendedores ambulantes, cuidadoras domiciliarias, feriantes, costureros, obreros de empresas recuperadas, artistas callejeros,  trabajadores de la construcción y trabajadoras socio comunitarias, productores de alimentos, entre otras.

Puede el Municipio, el HCM adhiriendo y SANCIONANDO esta polémica Ordenanza, DEFINIR que cuidar coches, lavar coches en la vía pública, NO ES TRABAJO? Cual vá a ser la PRÓXIMA ACTIVIDAD o TRABAJO que van a prohibir NUESTRAS CONCEJALAS Y CONCEJALES? Vender Pan o pastelitos? Limpiar vidrios y hacer un número artístico, malabares en un semáforo o en cualquier espacio público? Vender Frutas en una Avenida?

A nuestro JUICIO – Y RESPETAMOS TODAS LAS VISIONES- prohibir no es el camino, sobre todo porque deja sin opciones de laburo a cientos de personas, que se ganan el mango todos los días para sustentar decentemente su familia. 
ACLARAMOS: los casos policiales, los atropellos, la apropiación o el mal uso de la Vía Pública, no se pueden tolerar. Pero se tienen que abordar como una cuestión policial. El PEOR CAMINO ES LA PROHIBICIÓN, Y LA ESTIGMATIZACIÓN. Timbre para el Intendente Poletti y para el Concejo. Están a tiempo de reparar esta gran injusticia!