Cómo se preparan el Estado y las familias afectadas ante la llegada del Niño
Para el gobierno provincial hay dos cuestiones a seguir: obras clave como los coronamientos de la costanera o la defensa Garello, y quienes se encuentran viviendo sobre las defensas. "No hay soluciones estructurales", confiesan sobre muchos de ellos. Testimonios en barrio El Pozo y Colastiné Norte.
Por la llegada de El Niño, se espera que el último trimestre de 2023 sea de abundantes precipitaciones y de crecidas de las cauces por las lluvias en el sur de Brasil y el noreste argentino.
Especialistas y funcionarios dicen que la ciudad está preparada para afrontar un escenario como el de 2003, pero hay mayores dudas sobre una crecida extraordinaria del río Paraná.
Para el gobierno provincial hay dos cuestiones a seguir de cerca. Por un lado el descenso de los coronamientos en lugares como la costanera, por el constante paso de personas y para el que ya se realizan licitaciones, y por el otro las personas que se encuentran viviendo sobre o por fuera de las defensas del Gran Santa Fe.
¿Cuál es la solución para estos últimos? El secretario de Recursos Hídricos, Roberto Gioria, señala que trabajan en conjunto con el Ministerio de Desarrollo Social para “llevarlos a algun lugar cercano” aunque confiesa que “es muy difícil y los problemas se resuelven caso a caso”.
Destaca el avance sobre el terraplen Garello, donde había “seis o siete asentamientos que aceptaron reubicarse”. Se trata de la defensa que más preocupa al gobierno provincial y a los vecinos de Colastiné por la falta de una obra acorde a sus necesidades.
“Allí el río Colastiné choca y lo va erosionando. Le hicieron muchas obras (tres o cuatos grandes), pero todas colapsaron por estar mal planificadas, ejecutadas y/o controladas. Es un sector crítico que hoy está siendo reparado como se debe, pero se empezó un poco tarde y es una obra muy grande”, señala Ignacio Rintoul, vecino autoconvocado en defensa de la costa.
“Un poco tarde' es los tiempos que lleva la administración de la obra, que aparte no es barata. Por eso primero hicimos otras mejoras para aseguramos ante una crecida de ordinaria a extraordinaria. Hace más de un mes reforzamos la protección contra la erosión”, responde Gioria.
¿Qué puede pasar con las familias asentadas?
El Gobierno provincial no lo tiene del todo claro. Dice Gioria: “Con ellos se hizo evaluaciones, y bueno… hay defensas en las que se ubicaron sobre sus paramentos húmedos. O sea que están por fuera. Ante eso no hay solución y la gente tendrá que evacuarse. No hay solución estructural.”
Y añade: ―Se le dio intervención a Desarrollo Social para ver cómo hacemos para sacarlos o darles otro lugar. Cosa que es muy difícil porque ellos están acostumbrados a ese hábitat, y por las leyes no podemos llevarlo a un lugar que sea muy distinto aún cuando su su asentamiento sea irregular.
Por otra parte, muchos asentamientos se ubican sobre terrenos nacionales que son fiscalizados por el Ejecutivo municipal, como en el caso de barrio El Pozo, por lo que impera un trabajo coordinado y en conjunto entre varias dependencias estatales.
"Sufrí una inundación y me llegó el agua hasta bien arriba. El Estado no hizo nada. Nunca vinieron a alertarnos sobre una posible crecida del río. La solución posible es trasladarnos entre los vecinos, y nada más”, cuenta Juan Gabriel Acevedo, de una de las 12 familias que vive sobre la zona “los alisos” del extenso asentamiento.
―Nos preparamos guardando las chapas. Las metemos en el techo. Todos tenemos miedo porque acá hay muchos más chicos que antes. Llegué a atender 250 entre las cuatro partes del asentamiento: la parada del 2, los alisos, los cañaverales y pasando el puente ―, agrega otra vecina, Verónica Ojeda, quien realiza un merendero en el patio de su casa "cuando puede".
Agrega sobre el estado de situación en el que se encuentran: “Reubicarse duele porque a todos nos costó tener nuestra casa. Vivamos en un asentamiento o en un barrio, somos todos personas que sufrimos las mismas realidades. A mí hace pocos días me robaron el celular a la entrada de El Pozo."
El caso del terraplen Garello
Ignacio Rintoul señala que en Colastiné Norte se da un panorama diverso. “Tenemos muchísimos casos. Hay asentamientos de pobladores antiguos, de familias que ya vivían a la vera del río y se les realizó el terraplen arriba de sus casas. También hay asentamientos nuevos y se da el caso que llamamos 'asentamientos vip' por parte de gente que toma esos terrenos y construyen mansiones con piletas con vistas al río."
“El hecho de que haya viviendas encima del terraplen es crítico porque lo va erosionando, además de ser una zona de vulnerabilidad hídrica tremenda”, explica Rintoul.
Y continúa describiendo: “Se van asentando sobre el talud húmedo, la parte que da hacia el rìo. También sobre el coronamiento, que es la parte plana de arriba, y sobre el talud seco que es el interior del anillo".
“Se ocupan además los reservorios ―prosigue el vecino autoconvocado―, que son las grandes extensiones de tierra que deben quedar vacias para recolectar al agua del interior del anillo." Y agrega: “Con tanta sequia estaban secos y fueron ocupados. Hay gente tambien que aprovecha esos espacios de muy bajo control para cometer ilicitos y hasta pusieron una pista de motocross.”
Sobre la solución que debería dársele a las familias asentadas, Rintoul comenta: “Los vecinos de la costa no queremos que el Estado se sirva del espacio público y lo lotee para solucionarlo. Colastine Norte no tiene escuela secundaria y se está quedando sin espacios publicos como para poner otra plaza. Deberian hacerse cargo de su desidia comprando un campo y loteándolo como si fuese un plan de vivienda.”
Gioria aporta sobre el estado de las defenzas en esa zona: “Estamos trabajando en una obra muy importante sobre la defensa Garello. Al principio de la gestión hicimos además un refuerzo porque sabíamos que iba a llevar un tiempo. Duplicamos el coeficiente de seguridad.”
“Por eso hoy, así no se haga la obra de protección contra la erosión de la barranca, estamos en buena condiciones”, completa el funcionario provincial.