Cómo evalúa un jurado de freestyle: la mirada de Nano
Elías Altamirano es un apasionado del género hace 15 años y se desempeña como jurado dentro de la competencia Insert Beat. En comunicación con Santa Fe Plus explica la movida en la ciudad, las modalidades de las batallas y los valores de la cultura urbana.
La cultura del freestyle se caracteriza por la unión, el respeto y la libertad para expresar opiniones, “pero siempre bajo los valores del Hip-Hop”, aclaró Nano, rapper experimentado en área. “La unión en la movida es lo que suma a la construcción de la cultura local y representa la masividad que tomó lo el género en Santa Fe”, describió.
Elías Luciano Altamirano (27), más conocido como Nano, es jurado hace dos años en Insert Beat, aunque hace quince años es apasionado de la expresión artística. Cuando arrancó rapeaba, pero confiesa que actualmente disfruta más de presenciar los shows.
“La Insert”, como la llaman sus participantes, es una competencia rango de plata en la Liga Profesional anual FMS. Las sedes de sus encuentros varían, se trasladan de una plaza a otra dependiendo las batallas y las jornadas. Los costos de inscripción dependen de la actividad propuesta.
En comunicación con Santa Fe Plus, Nano explicó los criterios y detalles que tiene en cuenta a la hora de evaluar las competiciones. “Soy muy apasionado del freestyle y tengo una visión bastante amplia del espectro y de todos los estilos que hay dentro del mismo”, aseguró.
Ideas, rimas y coherencia
Nano a los doce años empezó acercarse a las batallas, a presenciarlas y se desempeña como jurado desde el 2017. A la hora de puntuar a rappers prioriza el contenido de las rimas, pero se confluyen otros elementos como lo novedoso, el “delivery” y la evolución.
—¿Qué es lo más importante en las batallas?
—El contenido de las rimas es importarte, pero también la forma en la que construyen una idea. Y siempre es más fácil acudir a lo fácil. Hay que saber medir y reconocer cuando alguien hace algo distinto.
“La coherencia que tiene cada uno a la hora de encarar la batalla también es clave. Porque no necesariamente tiene que ser un ataque directo. Si no se puede hacer una construcción de cuatro entradas distintas, pero con toda la coherencia de lo que se viene hablando”.
—¿En qué otros puntos prestas atención?
—Me fijo mucho en qué está diciendo y que está queriendo expresar. Si lo logró o no. Aparte cuando ves una constancia de ciertos competidores (al ver mucho freestyle), notas cuando está teniendo un día de esos en que decís “este muchacho está en su día, cómo se está luciendo”.
—¿La forma es importante?
—Valoro mucho el método, lo que se dice ahora el delivery, el cómo lo dice. Y ahí hago una evaluación general, ya sea tanto del contenido como de la consigna, porque a veces hay modalidades que se tienen que cumplir. Si se adaptó o no, qué hizo a favor, qué en contra y desde ahí hacer una evaluación general.
—¿El estilo personal de cada artista influye?
—Si, siempre hay evaluar en base a cómo lo hace uno y cómo lo hace otro. Porque cada uno tiene diferentes estilos. Al evaluar dos personas distintas, entra un poco más el criterio puntual. Si vos hiciste esto, o no, quién fue el que mejor lo ejecutó, si hubo fallas o una idea que no cerraste o quedó muy grande. Es decir, si no la supiste expresar bien.
Diferentes batallas
Las modalidades de competencia son diversas. Nano comparte algunas de las que suelen utilizar en “La Insert”.
4x4 donde son entre diez y quince segundos para entrar y responder. El contrincante dice algo y el otro tiene la posibilidad de responder o proponer una idea nueva.
También, hay duelos de 1versus1, donde se tienen cuarenta segundos para expresarse de manera libre.
Otro formato es el “Kickback”, un competidor hace la pregunta al otro y éste en tres compases tiene la posibilidad de responder a esa pregunta. El otro round a quien le tocó responder, le toca preguntar. “Ahí se arma un debate, una charla como nos gusta”, finalizó Nano.