A 17 años de la Ley Nacional de ESI: cómo se aplica en Santa Fe
Desde el equipo provincial de Educación Sexual Integral detallan las herramientas que se vienen implementando. Por otro lado, docentes de niveles primario, secundario y terciario relatan sus experiencias en las instituciones. Radiografía del derecho de niñas, niños y adolescentes a acceder a la información segura, científica y de calidad.
Buena parte de los abusos que se denuncian en la provincia provienen de lo que las niñas, niños y adolescentes pudieron manifestar en los espacios de Educación Sexual Integral, describe a Santa Fe Plus Ximena Frois, coordinadora del equipo provincial de ESI.
En 2006 se sancionó la Ley Nacional 26150, que establece que las y los estudiantes tienen derecho a recibir Educación Sexual Integral en los establecimientos educativos públicos, sean de gestión estatal o privada.
Pero en Santa Fe, sectores de la política, agrupaciones feministas y docentes se encuentran en la búsqueda de una reglamentación provincial que garantice su real acceso en todas las aulas. Al respecto, la vicepresidenta de la comisión de Género en Diputados, Gisel Mahumud, destacó que todos los proyectos presentados siempre tuvieron media sanción pero "el gran obstáculo está en el Senado”.
Desde hace cinco años la Ley de ESI viene perdiendo estado parlamentario en la Cámara Alta, primero en 2018 y luego en 2020. El proyecto volvió a ingresarse en noviembre del 2022, con fecha límite de tratamiento a comienzos de diciembre de este año (a menos que sea incluido en Extraordinarias).
“La mandaron a dormir a los cajones del Senado”, declara la diputada Agustina Donnet, y agrega: “Es una postura política que viene sosteniéndose de forma sistemática: el no tratamiento de lo que significa el principal reclamo de las y los estudiantes, quienes nos manifiestan que lamentablemente la ESI no llega a todos los establecimientos”.
Mahmud añade que la ley nacional es muy valiosa, pero que necesita ser revisada. "Nuestra sociedad cambio mucho en materia de derechos durante la última década. Hay más información y como sociedad también se profundizó en muchos debates", detalla la legisladora socialista.
Un derecho en sí mismo
Ximena Frois explica que la ESI “es un derecho en sí mismo, porque permite que otros derechos sean garantizados, porque incorpora el respeto a la diversidad sexual y de género y por el carácter científico y laico de sus contenidos”.
Cuidar el cuerpo, valorar la afectividad, ejercer los derechos, reconocer la perspectiva de género y respetar la diversidad son los ejes sobre los que trabaja la Educación Sexual Integral. “Trabajar la ESI es trabajar desde una perspectiva de derechos humanos”, sentencia Frois.
Para su actual implementación, quienes la militan buscan llegar a las instituciones de forma estratégica. Según Frois, “en Santa Fe hay 80.000 docentes y casi 5.000 establecimientos educativos y un millón de alumnos, por eso no se llega al uno a uno y debemos valernos de muchas estructuras institucionales para poder llegar a determinados lugares”.
“Nuestro desafío es poder llegar de forma real a cada aula, porque la ESI es un programa que no se acaba en una disciplina: implica la transversalización en toda la currícula de tres perspectivas que son altamente políticas y críticas como los derechos humanos, de género y diversidades sexuales”, describe la coordinadora.
Docentes, garantes de derechos
Tres docentes de la ciudad de Santa Fe describen las formas en las que acercan la ESI a las instituciones.
Dialogaron con Santa Fe Plus: Fernanda Pagura (FP), profesora de Ciencias de la Educación en los niveles inicial y primario en tres institutos de la región: Nº 8, Alte Brown Nº 30 Normal y Nº 64 Fonceca; Fernanda Frangella (FF), docente en las escuelas secundarias N° 596 y 340 de Santo Tomé; e Ivana Pividori (IP), docente en escuelas primarias.
—¿Cómo se da actualmente ESI en tu establecimiento educativo?
(FP): —Hablando desde los institutos que conozco, donde circulo por mi tarea de docente, puedo contar que nos hemos formado en las perspectivas epistémicas de la Educación Sexual Integral, pero también poniéndole el cuerpo, el compromiso y la militancia no solamente en las calles sino también en la academia.
En el caso del Almirante Brown, contamos con una docencia comprometida y con una decisión política de la Regencia en su aplicación. Esto logró que de a poco la ESI vaya transitando por las aulas, con el apoyo de parte del estudiantado.
— ¿De qué depende que se implemente?
(FP): —Es un derecho y como tal el Estado debería garantizarlo. Que no se aplique la ESI en las escuelas es una falla del sistema educativo, del Estado y de la gestión de turno.
(FF): —Los y las docentes cumplen un rol fundamental en el interés de trasmitir conocimientos con perspectiva de ESI. Se trata de personas que deciden planificar o hacerse cargo de algún suceso que acontece en la escuela haciendo referencia a contenidos de la ESI”.
—¿Cómo observás la implementación de la ESI en tu institución?
(IP): —Me parece importante que la capacitación dependa exclusivamente de los docentes, porque los cuadernillos de ESI ya tienen varios años y no llegan a los establecimientos en forma masiva. En cambio, considero relevante destacar que este año llegaron a los correos de todos los docentes la capacitación obligatoria en Ley Micaela, una herramienta también muy útil para capacitarnos con perspectiva de género.
(FF): —Si bien se están tratando algunos temas, resulta insuficiente ya que la ESI tiene que darse a lo largo de todo el trayecto educativo. Falta profundizar mucho en ese sentido. Y digo insuficiente porque a veces las y los alumnos dicen: "recuerdo algo de primero o segundo año sobre métodos anticonceptivos", pero al volver sobre los temas te das cuenta que esos aprendizajes no están consolidados, que hay dudas, que los mitos persisten.
Como cierre es preciso señalar que, por ley nacional, cada institución educativa debería incluir la ESI en su proyecto institucional, asegurando la transversalidad e interdisciplinariedad de sus contenidos en al currícula.
A tales efectos debería habilitar además la realización de talleres, cátedras abiertas, espacios de reflexión con los Centros de Estudiantes y jornadas con la comunidad educativa.