Condenan a dos santafesinos por abusar de niñas de su entorno familiar
Uno de ellos fue identificado como Ramón Pelozo, a quien se le impusieron cinco años de prisión por vulnerar la integridad sexual de la hija de la pareja de su hijo. El otro es Brian Alexander Ramírez, quien recibió una pena de cuatro años de prisión por ilícitos de los que fue víctima una prima.
Dos hombres fueron condenados por abusar sexualmente de niñas de sus respectivos entornos familiares en la ciudad de Santa Fe. Uno de ellos es Ramón Pelozo, de 60 años, para quien se dispuso una pena a cinco años de prisión por delitos cometidos en perjuicio de la hija de la mujer que era pareja de su hijo. El otro condenado es Brian Alexander Ramírez, de 24 años, quien recibió una pena de cuatro años de prisión por vulnerar sexualmente a una prima suya.
Los hechos ilícitos fueron investigados por la fiscal Alejandra Del Río Ayala. No obstante, son legajos diferentes que no tienen relación entre sí.
En su vivienda
En relación a Pelozo, la fiscal afrmó que “abusó de la víctima en reiteradas oportunidades a lo largo del año 2022, en ocasiones en las que ella fue de visita al domicilio de él y durante una convivencia que mantuvieron por algunos días”. Según mencionó la funcionaria del MPA, “por entonces, la niña iba a la escuela primaria”.
“En el marco del accionar ilícito, el hombre de 60 años le decía a la víctima que si contaba algo de lo ocurrido le iban a pasar cosas peores”, especificó.
Del Río Ayala valoró que “no obstante las amenazas, la pequeña logró hablar sobre sus padecimientos con una familiar de su confianza”, y resaltó que “junto a la madre de la víctima, ambas fueron hasta una comisaría en la que se radicó la denuncia correspondiente”.
En la casa de su abuela
En relación a la otra investigación, la funcionaria del MPA indicó que “en más de una oportunidad, entre 2017 y 2021, Ramírez sometió a su prima a abusos gravemente ultrajantes”. Detalló que “las conductas delictivas tuvieron lugar en la casa de la abuela de ambos, en la época en la que la víctima transitaba la primera parte de su escolaridad primaria”.
Asimismo, Del Río Ayala señaló que “años más tarde, la niña pudo expresar ante una docente lo que le había hecho su primo”, y destacó que “fue en una clase de Educación Sexual Integral (ESI)”. Al respecto, expuso que “desde la institución educativa convocaron a la madre de la víctima y le manifestaron lo que su hija había relatado”, y agregó que “esta mujer –que a su vez es tía del condenado–, se acercó a una Comisaría de la Mujer e informó lo que sabía”.
Juicios abreviados
Las situaciones procesales de los dos condenados fueron resueltas mediante juicios de procedimientos abreviados realizados en los tribunales de la capital provincial.
Ante el juez Nicolás Falkenberg, Pelozo reconoció su responsabilidad penal como autor de abuso sexual simple calificado por la convivencia y amenazas coactivas.
Por su parte, Ramírez admitió la autoría de abuso sexual gravemente ultrajante y la jueza Rosana Carrara lo condenó en tal sentido.
En ambos casos, la Defensa aceptó la atribución delictiva, la pena impuesta y la decisión de abreviar los procedimientos del juicio. A su vez, las madres de las víctimas fueron notificadas sobre lo dispuesto y expresaron su conformidad.