Qué dijo en su discurso Javier Milei
El referente de La Libertad Avanza se impuso en el balotaje y se convirtió en el nuevo mandatario de los argentinos. En su discurso, le habló a “los argentinos de bien” y prometió rápidamente cambios drásticos: “No hay lugar para gradualismos”.
“Buenas noches a todos los que están aquí presentes, a los que están en la calle festejando, y sobre todo buenas noches a los argentinos de bien, porque hoy comienza la reconstrucción de Argentina”. Con esa frase, Javier Milei comenzó su discurso triunfal tras imponerse en el balotaje con casi 14,5 millones de votos (55.69%) y convertirse en el presidente electo del país.
Casi dos horas después de que Sergio Massa (44,3%) reconociera su derrota, Karina Milei salió al escenario del búnker de La Libertad Avanza (LLA) para pronunciar una única y breve frase, la presentación de su hermano: “Quiero presentar al presidente electo Javier Milei”.
Luego de agradecer a su equipo, a su militancia, a los fiscales libertarios y del PRO y a Mauricio Macri y Patricia Bullrich, el referente de LLA basó su discurso en que esta noche “se terminó una forma de hacer política y comenzó una nueva”, como así también en que como gobierno deberá aplicar “cambios drásticos” rápidamente para evitar “la peor crisis de nuestra historia”.
“Quiero decirle a todos los argentinos que hoy comienza el fin de la decadencia argentina. Hoy empezamos a dar vuelta la página de nuestra historia y volvemos a retomar el camino que nunca debimos haber perdido. Hoy se termina el modelo empobrecedor del Estado omnipresente, que solo beneficia a algunos mientras la mayoría de los argentinos sufren. Hoy se termina la idea de que el Estado es un botín a repartirse entre los políticos y los amigos, hoy se termina esa visión de que los victimarios son las víctimas y las víctimas los victimarios, hoy retomamos el camino que hizo grande este país. Hoy volvemos a abrazar las ideas de la libertad, las ideas de Alberdi”, dijo Milei, quien se paró en soledad sobre el escenario (luego, en la calle, lo hizo junto a su hermana Karina, su vice Victoria Villarruel y su pareja Fátima Flórez).
En ese sentido, Javier Milei hizo hincapié en que “el modelo de la decadencia ha llegado a su fin, no hay vuelta atrás” y que sus ideas se basan en “tres premisas muy simples”.
Estas son: “Un gobierno limitado -y quiero que quede bien claro esto, que cumple a rajatabla con los compromisos que ha tomado-; respeto a la propiedad privada y comercio libre”.
Posteriormente, convocó a “todos los argentinos y a todos los dirigentes políticos que quieran sumarse a la nueva Argentina”, asegurando que “serán bienvenidos, no importa de dónde vengan, no importa qué hayan hecho antes, no importa qué diferencia” tengan.
Asimismo, sostuvo que sabe que “hay gente que se va a resistir” al cambio que proponen, y a ellos les dijo: “Dentro de la ley todo, fuera de la ley nada”.
“En esta nueva Argentina no hay lugar para los violentos, no hay lugar para los que violan la ley para defender sus privilegios, vamos a ser implacables con aquellos que quieran utilizar la fuerza para defender sus privilegios”, reafirmó, en una señal clara de la idea del uso de las fuerzas de seguridad que planteará durante su gestión.
El referente de La Libertad Avanza le pidió también al Gobierno actual “que sea responsable, que entiendan que ha llegado una nueva Argentina y que actúen en consecuencia”, y “que se hagan cargo de su responsabilidad hasta el final del mandato del 10/12”.
No obstante, para el futuro próximo no planteó un buen panorama, asegurando que deberán realizar un ajuste fuerte y veloz: “Que se entienda bien, la situación de Argentina es crítica, los cambios que nuestro país necesita son drásticos. No hay lugar para gradualismo. No hay lugar para la tibieza. No hay lugar para medias tintas. Si no avanzamos rápido con los cambios estructurales que la Argentina necesita, nos dirigimos derecho a la peor crisis de toda nuestra historia. Es fundamental que todos aquellos que queremos volver a abrazar las ideas de la libertad, trabajemos juntos a partir del 10 de diciembre y podamos darle respuesta a una sociedad que ha sido abandonada por la clase política las últimas décadas. Tenemos problemas monumentales por delante: la inflación, el estancamiento, la falta de empleo genuino, la inseguridad, la pobreza y la indigencia. Problemas que solo tienen solución si volvemos a abrazar las ideas de la libertad, si aquellos que queremos una Argentina distinta trabajamos juntos”.
Finalmente, Milei le habló a los demás países del mundo, asegurando su compromiso “es con la democracia, con el comercio libre y con la paz”, y que van “a trabajar codo a codo con todas las naciones del mundo libre para construir un mundo mejor”.
A modo de cierre, prometió que con sus ideas Argentina “dentro de 35 años volverá a ser una potencia mundial” y dijo: “No venimos a inventar nada, venimos a hacer las cosas que la historia ha demostrado que funcionan. Venimos a hacer lo mismo que hicimos durante el siglo XIX en nuestro país. Lo mismo que hicieron países como Irlanda hace no tanto tiempo. Venimos a abrazar las ideas de la libertad, que son aquellas que garantizan la prosperidad de los argentinos”.
Su despedida desde el escenario se dio al grito de “Viva la libertad carajo” y pidiendo que “Dios bendiga a los argentinos”.
A continuación, el discurso completo de Javier Milei:
Buenas noches a todos los que están aquí presentes, a los que están en la calle festejando, y sobre todo buenas noches a los argentinos de bien, porque hoy comienza la reconstrucción de Argentina.
Hoy es una noche histórica para la Argentina. Muchas gracias a todos los que vinieron e hicieron que esto sea posible. Al equipo que viene trabajando hace dos años para transformar la Argentina, y para lograr el milagro de tener un presidente liberal libertario.
Gracias a mi hermana Karina, porque sin ella nada de esto hubiera sido posible.
Además, también quiero agradecerle a ese gigante que me ha acompañado a lo largo de todo este proceso, que suele mantenerse en la oscuridad, que se llama Santiago Caputo y es el verdadero arquitecto de esto junto al Jefe.
También quiero agradecer a todos los integrantes de LLA que trabajaron sin parar para lograr este objetivo, y especialmente a los fiscales, tanto de LLA como los del PRO que pusieron el cuerpo para defender los votos. Porque dijimos que los votos estaban pero había que cuidarlos, y vaya que los cuidaron.
Quiero agradecerle muy especialmente al presidente Macri y a la señora Bullrich, que desinteresadamente, en un acto de grandeza como no se ha visto nunca en la historia argentina, pusieron el cuerpo para defender el cambio que la Argentina necesita.
Quiero decirle a todos los argentinos que hoy comienza el fin de la decadencia argentina. Hoy empezamos a dar vuelta la página de nuestra historia y volvemos a retomar el camino que nunca debimos haber perdido. Hoy se termina el modelo empobrecedor del estado omnipresente, que solo beneficia a algunos mientras la mayoría de los argentinos sufren. Hoy se termina la idea de que el Estado es un botín a repartirse entre los políticos y los amigos, hoy se termina esa visión de que los victimarios son las víctimas y las víctimas los victimarios, hoy retomamos el camino que hizo grande este país. Hoy volvemos a abrazar las ideas de la libertad, las ideas de Alberdi.
En definitiva, las ideas de nuestros padres fundadores que hicieron que en 35 años pasemos de ser un país de bárbaros a la primera potencia mundial. Esas ideas se basan en tres premisas muy simples: un gobierno limitado, y quiero que quede bien claro esto, que cumple a rajatabla con los compromisos que ha tomado; respeto a la propiedad privada y comercio libre. Quiero ser muy claro con algo, el modelo de la decadencia ha llegado a su fin, no hay vuelta atrás. Los resultados de este modelo están a la vista de todos. De ser el país más rico del mundo, hoy somos 130º, la mitad de los argentinos son pobres y el 10% es indigente. Basta de este modelo empobrecedor de la casta. Hoy volvemos a abrazar el modelo de la libertad para volver a ser una potencia mundial.
Al mismo tiempo, quiero decirle a todos los argentinos y a todos los dirigentes políticos, que todos aquellos que quieran sumarse a la nueva Argentina serán bienvenidos, no importa de dónde vengan, no importa qué hayan hecho antes, no importa qué diferencia tengamos. Estoy seguro que es más importante lo que nos une que lo que nos separa, porque eso es lo que va a hacer que pongamos de pie a la patria y volvamos a ser una potencia.
En definitiva, siempre que quieran sumarse al cambio que la Argentina necesita, serán bienvenidos. Sabemos que hay gente que se va a resistir, sabemos que hay gente que quiere mantener este sistema de privilegios para algunos, y que empobrece a la mayoría de los argentinos. A todos ellos quiero decirles lo siguiente: dentro de la ley todo, fuera de la ley nada.
En esta nueva Argentina no hay lugar para los violentos, no hay lugar para los que violan la ley para defender sus privilegios, vamos a ser implacables con aquellos que quieran utilizar la fuerza para defender sus privilegios. Al Gobierno queremos pedirle que sea responsable, que entiendan que ha llegado una nueva Argentina y que actúen en consecuencia. Que se hagan cargo de su responsabilidad hasta el final del mandato del 10/12. Así, una vez finalizado el mandato, podamos comenzar a transformar esta realidad tan trágica para millones de argentinos. Que se entienda bien, la situación de Argentina es crítica, los cambios que nuestro país necesita son drásticos. No hay lugar para gradualismo. No hay lugar para la tibieza. No hay lugar para medias tintas. Si no avanzamos rápido con los cambios estructurales que la Argentina necesita, nos dirigimos derecho a la peor crisis de toda nuestra historia. Es fundamental que todos aquellos que queremos volver a abrazar las ideas de la libertad, trabajemos juntos a partir del 10 de diciembre y podamos darle respuesta a una sociedad que ha sido abandonada por la clase política las últimas décadas. Tenemos problemas monumentales por delante: la inflación, el estancamiento, la falta de empleo genuino, la inseguridad, la pobreza y la indigencia. Problemas que solo tienen solución si volvemos a abrazar las ideas de la libertad, si aquellos que queremos una Argentina distinta trabajamos juntos. A todos aquellos que nos están mirando desde afuera de la Argentina, quiero decirles que la Argentina va a volver a ocupar el lugar en el mundo que nunca debió haber perdido. Nuestro compromiso es con la democracia, con el comercio libre y con la paz. Vamos a trabajar codo a codo con todas las naciones del mundo libre para construir un mundo mejor. Hoy es una noche histórica. No por nosotros, sino porque se ha terminado una forma de hacer política y comienza otra.
A los argentinos, quiero decirles que a pesar de los problemas enormes que tiene el país, a pesar de lo sombrío que luce la situación, quiero decirles que Argentina tiene futuro, pero que ese futuro existe si ese futuro es liberal.
No venimos a inventar nada, venimos a hacer las cosas que la historia ha demostrado que funcionan. Venimos a hacer lo mismo que hicimos durante el siglo XIX en nuestro país. Lo mismo que hicieron países como Irlanda hace no tanto tiempo. Venimos a abrazar las ideas de la libertad, que son aquellas que garantizan la prosperidad de los argentinos. Si abrazamos esas ideas, no solo vamos a poder solucionar los problemas de hoy, sino que dentro de 35 años volveremos a ser una potencia mundial. Sin lugar a dudas, hoy vamos a festejar, pero también es cierto que mañana desde la primera hora nos pondremos a trabajar para que el 10 de diciembre empecemos a traer las soluciones que los argentinos necesitan. Por lo tanto, quiero dar las gracias a todos, por el enorme trabajo, por acompañar, por creer en que se puede. Cuántas veces habremos dicho que la victoria en la batalla no venía de la cantidad de soldados, sino de las fuerzas que vienen del cielo. Por lo tanto, quiero darles las gracias a todos, y no podía terminar de otra manera… viva la libertad carajo. Dios bendiga a los argentinos, muchas gracias.