Por César Malato (Militante Peronista y de la Ec. Social y Solidaria

Resumiremos algunas de las acciones más relevantes que hemos presenciado durante estos 10 meses desde la llegada al poder de los Hermanos Miley. Lo decimos sin ambages: ninguna de estas medidas ha favorecido al pueblo, a la gente común. Todas han beneficiado a los ricos, los poderosos, los conglomerados extranjeros, y han puesto en riesgo los acuerdos democráticos que hemos construido a lo largo de 40 años.

Con el pretexto de un "protocolo anti piquetes", se ha desatado una represión brutal. Una decisión política inmodificable contra cualquier manifestación que se oponga a las políticas del gobierno. Hemos sido testigos de jubilados agredidos, lanzar gas pimienta en la cara de una niña de 10 años, personas detenidas ilegalmente y represión contra movimientos estudiantiles y sociales que protestan por la reducción de planes.

El Congreso, dominado por los aliados del gobierno, aprobó la Ley de Bases. Esta Ley  desmantela el 80% de la legislación laboral, anula beneficios sociales, autoriza -sin previa autorización del Congreso- a disolver Organismos Nacionales, despedir a mansalva empleados públicos, rematar a precio de ganga los Bienes del estado (edificios, empresas, tierras, vehículos, maquinarias). ¿Los beneficiados? Grandes grupos económicos y empresas extranjeras, el sector agroindustrial, en manos de pooles de siembra, que administran grandes extensiones de tierras, acentúa la concentración de la riqueza en unas pocas familias.

Se eliminó la Ley de Alquileres. Ha debilitado al extremo la situación de quién necesita de una legislación que lo proteja para tener certezas sobre su vida, bajo un techo medianamente digno y seguro. Además, peor aún, no se ha implementado ninguna política de acceso a la vivienda o regularización del hábitat urbano. El derecho a una vivienda digna ha sido excluido de la agenda gubernamental.

Se desreguló el acceso a Internet, derogando la normativa que lo consideraba un derecho básico y público. Lo mismo ha sucedido con el Compre Argentino, el Compre Nacional y la Ley de Góndolas. El resultado: los monopolios y las grandes cadenas alimenticias tienen vía libre para destruir al comercio local y las PYMES, eliminando miles de empleos generados por el consumo interno.

Se decretó la suspensión de las pautas oficiales por un año y se ha restringido el acceso a la información pública. Sólo los periodistas amigos y cómplices tienen acceso a lo que se está haciendo. La figura de la auditoría interna ha sido pervertida para cerrar comedores, merenderos y hasta TELAM, el medio público.

El sistema de salud no ha escapado al ajuste. Se han eliminado medicamentos oncológicos para niños y ancianos, mientras que la lista de medicamentos con descuentos para PAMI se ha reducido drásticamente. En plena crisis de salud mental, los hospitales especializados en este ámbito también están siendo cerrados.

Miles de toneladas de alimentos han sido dejadas a pudrir en galpones, mientras miles de personas pasan hambre. Programas de ingreso social, más de 27,200, han sido eliminados, dejando a decenas de miles sin el sustento básico.

La educación ha sufrido un golpe directo con la eliminación del Fondo de Incentivo Docente y la suspensión de obras públicas. El sector cultural, especialmente el cine nacional, también ha sido atacado con el recorte al INCA y la eliminación de incentivos a la producción cultural.

Eliminaron el Fondo para el Transporte Público urbano, lo que ha afectado en forma desigual a Ciudades del interior del País como la nuestra, y ha sostenido los beneficios -en menor medida- para el AMBA. El transporte público ha visto cómo las tarifas se han disparado, afectando directamente a las clases más vulnerables. 

El Gobierno ha sumado tropas argentinas a Israel, para combatir en el Líbano e Irán, sumándose a conflictos ajenos en Medio Oriente, alineándose con potencias como Estados Unidos y Francia.

“El ajuste más grande de la historia” como le gusta regodearse al Presidente en Foros Internacionales, ha deteriorado la vida de todos los días de los comunes, quienes vivimos de un ingreso fijo o de una actividad eventual, hayamos estudiado o no, tengamos un laburo en blanco, o seamos cuentapropistas. 

¿Qué cambió en Argentina? Hay algo que cambió profundamente: HOY NATURALIZAMOS la violencia y la crueldad. El Individualismo, la NO- SOLIDARIDAD, la MENTIRA. El NO hacer NI LEVANTAR LA VOZ, por el otro o por los otros.

VENIMOS. NOSOTROS VENIMOS bajo los Escombros. Sin dobleces ni pudores. Con lazos estrechos y firmes entre NOSOTROS y NOSOTRAS. Hilo con hilo hasta ser soga firme. Nuestra fuerza y energía es la construcción del proyecto social, político y económico para todas y todos.